Lectores y escritores

En este apartado el protagonista es el lector y sus creaciones, EL LECTOR ESCRITOR, en su sentido más amplio; es decir, no sólo el lector de mis libros sino todo aquel que quiera enriquecer este rincón literario con sus textos. Envíalos a la dirección:

miguelangelguelmi.escribe.narramos14@blogger.com



En el "asunto" de tu correo escribe el título de tu composición, tu nombre y, si lo deseas, tu lugar de residencia. Ejemplo:





La luz en la niebla. Pedro Márquez. Gran Canaria.



Por último, escribe o pega el texto en el cuerpo del mensaje.



¡Y RECUERDA! Cuida la ortografía y los signos de puntuación.



¡BIENVENIDOS!

Memorias de una inspectora. Cristian Suàrez. Gran Canaria

El día 12 de  septiembre de 1991 en la peluquería  corte cuya propietaria es María Gómez a las 12 de la mañana al abrir el negocio se encontró  sentada en el sillón a la ultima clienta del día anterior Sonia de la vega esta falleció a causa de un corte profundo en la garganta, junto a la víctima estaba descolgado el teléfono de la peluquería señal de que Sonia intento pedir ayuda. Esta fue la escena del crimen que tuve que examinar tras hacerlo, me dispuse a interrogar tanto a la dueña como a la única empleada del negocio. Al comenzar dicho interrogatorio me presente como Luisa Toledo, inspectora jefe de la policía de la comunidad de Madrid, al comenzar el mismo observe que ambas mujeres mostraban una actitud fría y sus respuestas eran escuetas y elocuentes pero en un momento de la entrevista el nerviosismo se apodero de la sala y las dos chicas comenzaron a discutir y así fue como descubrí que la dueña de la peluquería y la victima mantuvieron una acalorada discusión durante la noche del suceso ,esta discusión  estaba motivada por la rivalidad que ambas tenían desde hacía años ya que tanto Sonia como María años atrás fueron socias de esa misma peluquería dato que solo conocía la propia implicada y su empleada de confianza y fue esta la que revelo ese detalle a la policía . Enterarse de eso provoco que María se derrumbara y confesara como única autora del crimen a causa de su sed de venganza y envidia que sentía por la victima.
Poco tiempo después María fue condenada a 12 años de cárcel y yo fui condecorada con la medalla al merito policial
Para acabar me gustaría recordar que resolver ese caso me aporto gran satisfacción personal y años después de mi jubilación lo recuerdo con nostalgia  

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