Lectores y escritores

En este apartado el protagonista es el lector y sus creaciones, EL LECTOR ESCRITOR, en su sentido más amplio; es decir, no sólo el lector de mis libros sino todo aquel que quiera enriquecer este rincón literario con sus textos. Envíalos a la dirección:

miguelangelguelmi.escribe.narramos14@blogger.com



En el "asunto" de tu correo escribe el título de tu composición, tu nombre y, si lo deseas, tu lugar de residencia. Ejemplo:





La luz en la niebla. Pedro Márquez. Gran Canaria.



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¡BIENVENIDOS!

La llamada inesperada, Miriam Marrero Benítez

Todo comenzó cuando el inspector Smith recibió una llamada anónima, una mañana de otoño. Al otro lado del teléfono, escuchó una voz distorsionada que le dijo: -Esto no ha acabado inspector, es más, sólo acaba de empezar...Le bastó escuchar esa frase para reconocer al individuo, se trataba del famoso terrorista Xavi Gorrachategui, el cual, había podido escapar del país hace 5 años, antes de ser detenido por las autoridades.El inspector no lo dudó ni un segundo, se subió en su coche patrulla y acudió directo a la comisaría, con el propósito de reunir a todo su equipo lo antes posible.Tras largas horas de planificación, se organizaron de forma estratégica para patrullar por toda la ciudad en busca del escondite de Xavi.
Cayó la noche y el inspector regresó a casa. Al bajar de su vehículo, pudo observar la presencia de un paquete sospechoso sobre el felpudo de la entrada. Sacó su pistola y con paso sigiloso se acercó a él. Tras inspeccionarlo, descubrió que no era peligroso, lo recogió y entró en casa. Dejó el paquete sobre la mesa de la cocina y mientras se quitaba la camisa abrió la nevera y cogió una cerveza, todo ello sin quitarle ojo al intrigante paquete. No esperó más, se sentó y lo abrió. Dentro había una carta y una botella pequeña de lo que parecía un perfume. La carta, pertenecía al malvado Gorrachategui y en ella explicaba su maléfico plan para acabar con la vida de la presidenta, dicha carta estaba acompañada de una muestra del veneno que utilizaría para culminar su propósito. Sin dudarlo, el inspector Smith, acudió lo más rápido que pudo a la casa de la presidenta para ponerla en sobre aviso. Al llegar y ver el despliegue de autoridades y medios de comunicación que allí se agolpaban, se dio cuenta de que había llegado demasiado tarde. Bajó del vehículo y cuando daba su segundo paso recibió una llamada. Al responder pudo oír la misma voz distorsionada que le decía... -Esto no ha acabado inspector, es más, sólo acaba de empezar...

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