El Misterio del Jardín- Ainhoa Martín Naranjo

 

Anne Strauss, era una inteligente escritora de renombre, cuyas obras habían llegado a lo más alto de las listas de éxitos, de toda Gran Bretaña.

Ella vivía en una gran mansión, a las afueras de Chesterfield, un pueblo de apenas veinte habitantes, en el que trataba de vivir en el absoluto anonimato, algo tan deseado por las personas famosas. Su casa, contaba con quince habitaciones, ocho baños, una gran sala de estar, una cocina inmensa…pero para ella lo más importante era su jardín. En él, Anne pasaba horas y horas acostada en el verde césped, deleitándose con las más maravillosas especies de flores traídas de todo el mundo, o dándose un chapuzón en su piscina. Aquel jardín, era su vida, allí lograba apartarse de la realidad e introducirse en el fantástico mundo de la imaginación, ese era su secreto para el éxito de sus libros.

Pero un buen día, ocurrió algo sorprendente. Era media tarde, ese momento en el que los últimos rayos de sol sobresalen en el color naranja del atardecer, y Anne y su marido Jhon Meregal, acababan de llegar de la presentación de uno de los libros de ella, y se dispusieron a darse un baño en la piscina. Al salir, comenzaron a notar cómo sus pieles cambiaban de textura, de color… horrorizados, acudieron corriendo a un espejo y para sorpresa de ellos, habían cambiado por completo. Anne, había envejecido, su piel estaba totalmente arrugada, su melena era blanca como la nieve, sus manos parecían de una persona bastante mayor…Jhon, por su parte, tenía aspecto de "homínido", su nariz se había ensanchado, sus orejas habían aumentado considerablemente, el color de su piel era bastante oscuro…Ninguno se explicaba que era lo que había podido suceder, pero tenían que buscar una solución urgente.

Con aquel aspecto, tanto Anne como Jhon se negaban a salir a la calle, pues su vida tranquila y anónima se acabaría y volverían a ser las personas famosas, perseguidas por todos, ya que llamarían la atención allá a donde fueran. Por tanto, se dispusieron a buscar el número de alguna persona que los pudiera ayudar.

Tras varios días de investigaciones, lograron encontrar el teléfono de una curandera, que se trasladó a la casa y tras un análisis del agua, les advirtió de que su cura se hallaba en la leche Puleva Digestiva Complet, que al ser baja en lactosa produciría una reacción química con el virus F78, el cual se encontraba en la piscina, y les devolvería a su estado normal. Sin embargo, la curandera también les comentó, que para que surgiera efecto, debían ellos mismos ir a comprarla, dejando la vergüenza a un lado, y el miedo a ser reconocidos, pues ello les estaba impidiendo hacer una vida normal.

De esta manera, Anne y Jhon, acudieron al pueblo, y compraron la leche, sin ocultarse. Al llegar a casa, se la bebieron, y tras varios segundos, volvieron a ser el matrimonio feliz que eran hasta entonces, pudiendo hacer su vida tal y cómo se les antojaba sin tener tanto en cuenta su repercusión en la sociedad.

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